Receta para hacer polos de ciruelas amarillas

Que los niños coman fruta es, a veces, una odisea. De hecho, en ocasiones, les da por una y no hay forma de cambiar, siempre quieren la misma.

Para que la tarea de incorporar frutas en su dieta sea más sencilla, podemos jugar con el color y la forma de las piezas, e incluso crear otra forma más apetecible a los ojos del niño, como ya hacemos con el pescado o las verduras, ocultándolas en la pasta o en barritas.

Por ejemplo, en verano, que hace calor, podemos hacer polos helados de frutas. Ya sabéis que los polos atraen mucho su atención, así que tenemos que aprovechar. Además ¡son muy fáciles de hacer!

Por ello, hoy os quiero enseñar la receta de unos polos de ciruela amarilla que hice hace unos días y fueron un éxito:

Polos helados de ciruelas amarillas

Ingredientes

• 20 ciruelas amarillas (tamaño pequeño)
• Un chorrito de agua
• Un chorrito de miel (se puede usar sirope de ágave)
• 6 poleras (estas las compré en Ikea)

Cómo hacer los polos

Primero que todo pelaremos las ciruelas y les quitaremos el hueso. Una vez tenemos la pulpa de las ciruelas la metemos en un vaso o recipiente apto para la batidora y con esta las trituramos.

La ciruela amarilla tiene agua, pero aún así echaremos un chorito de agua para que quede más líquida y tenga mejor congelación.

Este tipo de ciruelas son un poco amargas. A mí me gustan así, ya quedan unos polos con un sabor diferente, pero si queréis contrarestar ese sabor amargo, podéis echar miel.

Por último, rellenamos las poleras y metemos los polos en el congelador unas horas. Es conveniente que al menos pasen en el congelador un día, ya que de lo contrario podrían no estar suficientemente congelados.

Para desmoldarlos, lo mejor es poner la polera en agua tibia, de manera que el polo se despegará un poco de la pared y lo podremos sacar con facilidad. Lo siguiente es disfrutar de la fruta helada y combatir el calor.

Y ya tenemos nuestros polos de ciruela amarilla. ¿Qué os parecen?